La pareció que veía un Albatros
revoloteando en torno de la lámpara;
cuando volvió a mirar, vio que era
un sello de un penique.
Mejor que te vayas a casa, dijo,
...que las noches están muy húmedas>>.
...Yo mismo no puedo explicarme, me temo,
porque, como ves, no soy yo mismo.
...¡Oh, mi piel y mis bigotes!
Esto es, esto es lo que me oprime el alma.
El mejor momento para salir a la captura de cangrejos
humanos es cuando brilla, plateada,
Para conocer las claves de la naturaleza de Cáncer te
será muy útil, lector, mirar un poco
Los estados de ánimo pasajeros de Cáncer están
sincronizados con
Es posible que la primera vez que lo encuentres esté
riéndose con su <<extravagante risa lunar>>, irresistiblemente contagiosa,
que recorre de extremo a extremo la escala, con profundos y guturales
armónicos. Se desgrana en risitas y carcajadas hasta estallar finalmente en
un cacareo que suena exactamente como si doscientas gallinas acabaran de
poner doscientos huevos perfectos. Si está en su papel de animador de la
fiesta, no te costará nada encontrar a Cáncer. Será el tipo mas divertido
del salón, a risa por minuto. Y si no es él quien está actuando, estará
festejando las gracias de algún otro. A nadie le gustan las bromas más que a
Cáncer, y su faceta divertida es tanto mas inesperada cuanto que irrumpe de
manera tan incongruente en su personalidad, normalmente tranquila y serena.
El humor lunar es profundo, jamás superficial ni trivial, porque surge de su
notable capacidad de observación del comportamiento humano.
Es posible que Cáncer no se ponga todos los días su
risa lunar, pero siempre puede sacarla en un abrir y cerrar de ojos de su
viejo baúl del sótano.
No son gente que se desviva por las candilejas, como
los extrovertidos Leo o los apayasados Sagitarios, pero los Cáncer tienen un
pavoroso sentido de la publicidad, cuando les da por hacerse notar. No te
dejes engañar por esa aparente modestia. Secretamente, les gusta que les
presten atención, y les embriagarán los titulares que puedan conseguir. A
Cáncer no le encontrarás persiguiendo la fama con pasión (no hay nada que
persiga con verdadera pasión), pero ten por seguro que tampoco huirá de
ella. Más fácil será verle calentándose al calor de los aplausos que huyendo
de ellos. Puede que haya cosas de las que Cáncer se esconda, pero el
reconocimiento no es una de ellas.
Si eres de esas personas que se enfrían fácilmente,
ponte la gabardina antes de exponerte a la humedad de un Cáncer que se halle
en un estado melancó1ico: es capaz de echarte cubos de agua fría hasta que
te den temblores y escalofríos. Cáncer puede estar en un momento bajo y
hundirte en una depresión mas profunda que el fondo del océano.
Habitualmente, sus temores están bien cubiertos por el disparatado humor
lunar, pero siempre están con él, acosándolo día y noche con una vaga
sensación de peligros innominados que acechan entre las sombras. Nunca muy
lejano, el pesimismo estará siempre pronto a frustrar los hermosos vuelos de
su fantasía. Un Cáncer puede lanzarse al más increíble viaje a las
estrellas, en alas de su imaginación, si consigue ignorar esa machacona voz
interior que insiste en advertirle que puede perderse en el espacio. Pero
hasta que aprende a dominarlos, sus miedos constituyen el ta1ón de Aquiles
que le duele cada vez que intenta volar demasiado alto.
Sus lágrimas no son nunca lágrimas de cocodrilo; fluyen
de los profundos ríos de su corazón, frágil y vulnerable. Con una mirada
dura o un tono de voz áspero puedes herir sus delicados sentimientos, y la
crueldad puede llenarle los ojos de lágrimas o inducirle a un completo
retraimiento. (Es extraño, pero Cáncer rara vez tiene fiebre; es mas
probable que sufra de escalofríos.) En tales ocasiones no es fácil descubrir
al Cangrejo, porque cuando está herido desaparece en un silencio lleno de
reproche. A veces puede ser que se desquite con una sana digna de Escorpio,
pero por lo general lo hará en secreto y no abiertamente, con el olímpico
desprecio de los cangrejos por las consecuencias. La mayoría de las veces,
más bien, eludirá todo intento de igualar puntos, y se sentirá contento por
esconderse bajo su caparazón protector. Cuando le hayas herido, puedes
pasarte días enteros tocándole con un palo sin conseguir que reaccione. No
abrirá la puerta, no contestará al teléfono ni las cartas. Cuando se hallan
en un estado de incertidumbre, desesperación o tristeza, los nativos de
Cáncer buscan el retiro y la soledad, como los verdaderos cangrejos.
Hay otro estado de ánimo propio de Cáncer: el malhumor.
La persona que te salió con un exabrupto cuando le preguntaste la hora, o
que estuvo a punto de arrancarte la cabeza por pedirle que te pasara la sal,
era probablemente Cáncer que sufría uno de sus ataques de malhumor que le
llevan a odiar al mundo. No es que esté enojado contigo, está desilusionado
de la vida. Ya se le pasará y volverá a ser la persona dulce, suave y
comprensiva que conoces, cuando cambie
Hay dos tipos Cancerianos básicos. El primero tiene un
agradable rostro redondo, la piel suave, la boca grande y sonriente, los
ojos casi circulares: mas bien un aspecto de bebé. Piensa en la cara de
Todos los regidos por
Los Cancerianos tienen tal dominio sobre las imágenes,
y sus fluctuaciones anímicas son tan intensas, que pueden hacer que los
demás las sientan. Su imaginación se abalanza sobre la alegría y el dolor,
sobre el horror y la compasión, sobre la tristeza y el éxtasis, y asegura
firmemente cada emoción con la intensidad retentiva de su memoria. Absorben
imágenes y las reflejan con la fidelidad de un espejo o de una cámara. Cada
experiencia les queda grabada en el corazón como una fotografía queda
registrada en el negativo. Jamás olvidan ninguna de las lecciones que les ha
enseñado la vida, ni las que la historia enseña a la humanidad. Cáncer
reverencia el pasado y es generalmente patriota de corazón. Las figuras
históricas le llaman la atención tanto como sus propios antepasados.
Frecuentemente, es coleccionista de antigüedades, viejos tesoros y reliquias
antiguas, y el ayer despierta en él una curiosidad insaciable. Cáncer es una
especie de arqueólogo mental, que está continuamente haciendo excavaciones
en busca de hechos fascinantes.
Es también un pozo de sigilo. Automáticamente, la gente
le confía sus secretos, pero la sensibilidad del Cangrejo le permite
conocerlos sin que hayan mediado las palabras. Su compasión es profunda y
enormemente intuitiva; no son muchos los secretos que Cáncer no pueda
descubrir, si le interesan. Sin embargo, es una calle de una sola dirección.
El Cangrejo obtendrá toda la información que pueda sobre ti, pero jamás te
dejará conocer sus propios pensamientos. Sus sentimientos están
cuidadosamente resguardados de las miradas indagadoras. Al Cáncer típico no
le gusta hablar de su vida personal, pero le encanta saber de la tuya,
porque para su imaginación lunar le resulta fácil adivinar lo que tú no le
cuentas. Sin embargo, es raro que Cáncer adopte la actitud de juez;
simplemente deduce, absorbe, refleja.
Aunque devuelva las emociones como un espejo, el
Cangrejo no soltará sin lucha las cosas tangibles. Date una vueltecita por
la playa y observa los hábitos de los verdaderos cangrejos. Cuando atrapan
un objeto (y esperemos que no sea tu dedo gordo), se agarran a él como un
salvavidas. Antes pierden una pinza que soltarlo. Si el cangrejo pierde una
pinza, le crece otra, así que puede agarrarse otra vez con la misma
tenacidad, y esto ha de servirte de lección para cuando trates de conseguir
que Cáncer desista de algo que él –o ella– realmente quiera. Cáncer jamás
renunciará a un objeto que atesora, y que tanto puede ser un amigo o un
pariente a quien quiere como un título o un cargo; desde un viejo
daguerrotipo a un par de pantuflas deshilachadas, con las suelas medio
gastadas.
Mientras estés en la playa, toma algunas notas más
sobre las costumbres del verdadero cangrejo. Su manera de andar, por
ejemplo. Si le ha echado el ojo a tu dedo gordo, no esperes que se encamine
directa y decididamente hacia tu pie. Primero retrocede unos pasos. Después
se desplaza de costado. De pronto, sin previo aviso, se arrastra hacia el
otro lado. Parece siempre que se mueva en la dirección opuesta, pero ni por
un segundo se descuida: si ese apetitoso dedo gordo empieza a alejarse de
él, entonces avanzará directamente. Y más vale que corras, si no quieres que
te hinque las pinzas. Cuando ve que corre riesgo de perder el bocado que le
tienta, la cosa va en serio. El Cangrejo humano imita exactamente estas
tácticas. Cáncer nunca va directamente detrás de lo que quiere. Su
estrategia consiste en moverse en todas direcciones, salvo hacia adelante. Y
a este juego de los cambios puede jugar indefinidamente, hasta que da la
impresión de que algún otro será quien se lleve el premio. Entonces, el
Cangrejo juega sus cartas con rapidez y astucia, da un salto hacia delante,
se adueña del trofeo y no lo suelta.
De manera muy semejante se conducen cuando se trata de
generosidad y de dar algo. El corazón de Cáncer es demasiado blando para que
no lo conmuevan las necesidades de la gente.
Realmente, se preocupa y quiere ayudar. Pero da
cautelosamente un paso atrás y espera, para ver si no hay alguien que se
adelante antes que él. ¿Por que va a dilapidar él desatinadamente su tiempo
o su dinero, si no es necesario? Cuando todas las otras fuentes fallan,
cuando ninguna otra ayuda da señales de materializarse, Cáncer salva la
situación en el último momento; dejará que te hundas dos veces, pero te
salvará en el minuto antes de que te sumerjas por tercera vez. Es demasiado
bondadoso para quedarse mirando cómo te ahogas, pero ten por seguro que él
no se mojará si anda por ahí cerca un salvavidas, o si tiene la impresión de
que tú solo puedes llegar nadando a la costa. Es auto preservación, no
egoísmo ni falta de bondad. El corazón del Cangrejo es tierno por debajo de
su caparazón duro y protector. Pero él no tiene más que cierta cantidad de
tiempo, dinero y emociones para dar, y prefiere distribuirlos con prudencia.
Es frecuente que su gesto final sea magnificente y generoso, pero para su
mentalidad lo sensato es observar y esperar antes de actuar. Nadie podría
acusarle de impulsivo.
Cuando efectivamente actúa, quiere tender detrás de si
–o de ti– algún tipo de hilo que le sirva de registro. El Cangrejo calcula
cuidadosamente sus acciones, basándose en experiencias, ya sean propias o
ajenas. Necesita como cimiento la fuerza de un precedente aceptado o la
tranquilidad de una seguridad financiera. Le inquieta andar sólo sin una
póliza de seguro, y por eso la mayor parte de sus albures terminan en éxito,
y cada jugada final es un golpe de gracia ejecutado con delicadeza.
Naturalmente, es raro que Cáncer pueda caerse en un
pozo en la oscuridad. Con una fogosa influencia lunar o un signo de fuego en
el ascendente, es posible que se arriesgue en alguna maniobra ocasional,
pero si fracasa se sentirá desdichado por haber ido en contra de su propio
juicio personal mas íntimo. Puede ser que las influencias de Leo o Sagitario
le hayan inducido a actuar, pero al volver al imperio de su propio signo
solar después de la derrota, se siente inundado de desdicha. Cáncer tiende a
cavilar sobre sus errores en vez de desentenderse con un encogimiento de
hombros de la mala suerte y hacer un nuevo intento, y antes de que corra
otro albur tendrá que pasar algún tiempo.
Sea hombre o mujer, el Cangrejo ama su hogar con un
respeto rayano en la reverencia. Ningún sumo sacerdote de tiempos pasados
sintió jamás su altar como algo más sagrado de lo que es para Cáncer el
lugar donde cuelga su sombrero viejo.
Es posible que veas colgar de sus paredes uno de esos
letreros que dicen <<No hay sitio como el hogar, por humilde que sea>>. (Si,
ya sé que normalmente la frase es al revés, pero esto es algo que su hijita
hizo en la escuela y para Cáncer es una obra maestra, una perla
inapreciable. Y la admira a menudo.) Su hogar está donde juega, vive, ama,
sueña y se siente seguro. Aunque su profesión pueda obligarle a viajar por
medio mundo, ningún Cáncer es realmente feliz si no tiene un rinconcito que
pueda llamar suyo. Algún día observa la expresión en el rostro de un
Cangrejo que vuelve a casa después de un largo viaje. Es éxtasis puro.
Por más dinero que acumule como reserva, Cáncer jamás
se siente realmente seguro, y por más amor que le brinden, siempre necesita
más. Sus emociones nunca le permiten la seguridad suficiente para relajarse
por completo. Siempre está acumulando cosas palpables en previsión de algún
imaginario desastre futuro. Hay nativos de este signo que realmente tienen
debajo de la cama grandes cajas de cartón llenas de provisiones de todas
clases. Para ahuyentar las pesadillas. Tal vez pienses que estoy exagerando,
pero ¿cuándo fue la última vez que miraste debajo de la cama de un Cangrejo?
Y si no encuentras allí las latas de conservas, fíjate en los estantes de la
despensa. Tal vez te encuentres con dos docenas de latas de paprika y
veintiocho cajas de pan rallado enriquecido con vitaminas que compró en una
liquidación, en 1943. ¿Para qué las reserva? No hagas preguntas tontas.
Algún día puede haber hambre en el país, y él estará preparado. (Noé debió
de haber nacido en julio, porque a él tampoco le pescó el diluvio con las
velas bajas.) ¿Por qué no usa toda esa paprika y ese pan rallado? La
respuesta a eso plantea otra pregunta. ¿Por qué no usa esos catorce pares de
pijamas nuevos y las siete docenas de bufandas de cachemira que le han ido
regalando a lo largo de los años? Todavía están envueltas en el papel.
¿Quién sabe? Tal vez Cáncer proyecte usarlos para abrigar a los animales
cuando se produzca el próximo diluvio. ¿Por qué no? Su visión es así de
anticipatoria, y las catástrofes de ayer las recuerda con toda precisión,
aún sin haberlas presenciado.
Con frecuencia encontrarás a Cáncer en el agua. Si no
está nadando, se dedicará a hacer esquí acuático, o caminando por el agua
cuando menos. A no ser que en su carta natal haya alguna influencia
planetaria definida que le haga tener miedo a las olas, el Cangrejo pasará
la mayor parte de su tiempo libre en la playa. Son muchos los Cáncer con su
barco propio; les atrae mucho mas tener una cáscara de nuez donde poder
refugiarse que una docena de televisores en color o cincuenta automóviles.
Hay Cangrejos que poseen unos yates fabulosos, pero aunque sea un botecito
de remo o una canoa, su propietario Cáncer se sentirá feliz remando o
haciendo de timonel. Es como si los de este signo tuvieran un sueño
particular y secreto que se les ha perdido en la profundidad de las aguas, y
tratarán de encontrarlo. Más de la mitad de los Cangrejos que conozcas serán
navegantes de fin de semana. Tal vez sea la llamada de
Las emociones de Cáncer pueden ser más poderosas que el
cuerpo físico. La aprensión y las preocupaciones son susceptibles de
provocarle una enfermedad, y la alegría puede poner bien a Cáncer. Es
frecuente que tema un colapso financiero, o la pérdida de alguien que
afectivamente necesita. Si su seguridad se ve amenazada –ya sea la económica
o la del corazón puede caer en una depresión que inconscientemente lo
predispone a enfermedades o accidentes. Su activa imaginación es en
ocasiones lo bastante morbosa como para convertir en grave o crónica una
dolencia menor. Cuando está en sus momentos sombríos, Cáncer responde mal a
los estímulos positivos; puede pensar que eres indiferente porque no te
compadeces de él, pero –diga él lo que diga– la compasión es lo último que
necesita el Cangrejo cuando está enfermo. Si se pone melancó1ico ante una
terrible perspectiva, se está buscando verdaderos problemas y necesitará el
doble de tiempo para curarse.
Las áreas más vulnerables son el pecho, en hombres y
mujeres, las rodillas, riñones, vejiga y piel. La zona de la cabeza y de la
cara también es delicada, lo mismo que el estómago y el sistema digestivo.
Los Cáncer son, prácticamente, los inventores de las úlceras, pero los que
se mantienen serenos y recurren a su maravilloso sentido del humor para
superar las depresiones, pueden fácilmente mantenerse bien hasta una
avanzada madurez. Si llegan a coger con firmeza la felicidad y no la
sueltan, los Cangrejos tienen el poder de aferrarse a la vida con la misma
tenacidad con que se aferran a periódicos y maceteros viejos. La alegría, el
optimismo y la risa, tomadas todos los días y en grandes dosis, les
mantendrán sanos de cuerpo y alma. Lo que Cáncer se imagina que siente, es
lo que siente realmente. Ningún otro signo es tan propenso a enfermar por
ideas negativas, pero tampoco ninguno es capaz de tan sorprendentes milagros
de autocuración. Es una contradicción extraña, y no olvidarla resultará
enormemente beneficioso para todos los nacidos bajo este signo.
Muchos de ellos son jardineros natos, que cuidan y
riegan amorosamente sus plantas, y muchos cultivan también con la misma
devoción florecientes cuentas bancarias. A Cáncer se le pega el dinero y,
como es una sensación que no le disgusta, deja que se le pegue. En sus
gastos es frugal, por decir lo menos.
Aunque influencias impulsivas afecten su carta natal,
el Cangrejo siempre mantendrá algunos billetes en reserva para los días
malos. Si te dice que está en quiebra, quiere decir que le quedan las
últimas decenas de miles, lo cual para él es una situación desesperada. Para
la administración de fondos nadie es mas capaz que el Cangrejo (aunque
Tauro, Capricornio o Virgo puedan seguirle muy de cerca), experto en
acumular dinero y en hacerlo crecer como crecen las flores y los árboles que
él planta. Rara vez se escapará de sus manos tenaces o se escurrirá entre
sus dedos, y nunca le verás arrojar el dinero por la ventana por el solo
placer de librarse de él. Sólo su cautela excede a su generosidad. El viejo
John D. Rockefeller, que era Cáncer, pensaba probablemente que era muy
manirroto cuando les daba todas esas monedas a los niños; le divertía seguir
gastando de semejante manera el dinero, al mismo tiempo que enseñaba
economía. Así y todo, el Cangrejo compartirá de buena gana lo que tiene
cuando alguien a quien el quiere o que le gusta se halla en situación de
verdadera necesidad. Un niño siempre le conmoverá lo suficiente para sacarle
algún dinero, pero nunca perdonará al comerciante que le cobre unos centavos
de más por la lata de judías.
Para Cáncer, de alguna manera, la comida representa
seguridad. Si Mother Hubbard,
el personaje de las Nursery Rhymes inglesas, hubiera nacido en julio, jamás
se habría recuperado del shock de haber encontrado vacío el armario. No
importa lo que coma, el Cangrejo siempre se siente mas seguro cuando la
despensa está hasta rebosar. Al hablar de comida, su rostro expresivo se
ilumina, y las historias de desnutrición le horrorizan, realmente. Cáncer se
preocupa auténticamente por el hambriento, y se siente responsable de todos
los estómagos vacíos del mundo. (El conocido matemático y astrólogo Carl
Payne Tobey señaló que la consigna política del Cáncer Nelson Rockefeller en
su campaña en los supermercados era: <<A él le importa>>). Para Cáncer,
desperdiciar comida es un crimen. Puedes repetir todas las veces que
quieras, pero cuidado con dejar restos en el plato.
Ambos sexos poseen un fuerte instinto maternal. Son
gente que siempre está tratando de llenar a alguien con una buena comida
caliente, o de protegerlos del aire húmedo de la noche.
Cáncer trata a sus amigos y seres queridos como si
fueran bebés, y revolotea protectoramente en torno a ellos. Es difícil decir
que es lo que con mas profundidad afecta a las emociones lunares, si los
niños, la comida o el dinero.
Su naturaleza sensible queda oculta bajo un duro
caparazón, y el Cangrejo tiene la sensatez suficiente para evitar los mares
tormentosos. Durante la mitad del tiempo vive en la tierra, la otra mitad en
aguas profundas. Se viste con el rielante dorado pálido y luminoso de
Personalidades Cáncer famosas
John Quincy Adams
Julio Cesar
James Cagney
Marc Chagall
Rembrandt
Red
Andrew Wyeth
..A veces busco panecillos
o preparo trampas para cangrejos;
a veces busco en las verdes colinas
ruedas de cabrioles;
y de esa manera –dijo con un guiño–,
me gano el dinero...
Y con mucho placer brindaré
a la noble salud de Su Señoría.
Taciturno experto en circunloquios lo es, pero atolondrado
y charlatán, no. No esperes que este hombre deje al desnudo su alma el primer
día que lo conozcas. Cáncer jamás confía en los extraños, y hay ciertas cosas
que ni siquiera sus mejores amigos saben. Llegar a conocerle exige mucho tiempo
y una buena dosis de paciencia. Si te presentan a uno de ellos en uno de sus
días agrios y quisquillosos, es posible que no te sientas muy deseosa de
conocerlo mejor, pero prueba otra vez, no abandones tan fácilmente.
Cáncer puede ser casquivano y voluble, pero también es
capaz de lealtad y sensibilidad. Sin previo aviso, ese ceño fruncido puede ceder
el paso a una sonrisa. Sus ásperas quejas y sus modales gruñones van
suavizándose lentamente hasta convertirse en un tono de ternura, un segundo
antes de que le sacuda una risa profunda, o se sofoque en el intento de
ahogarla, o estalle en una histérica carcajada lunar. Cuando esté triste y
pensativo te sentirás impulsada a abrazarlo para calmar su melancolía. Cuando
exhiba su agudeza intuitiva, te quedarás mirándolo con reverencia. Su cautela te
impresionará, te deprimirá su pesimismo.
Puede ser tan galante, cortes y considerado que casi
esperarás que te invite a bailar un minué. Aunque, desde luego, es un romántico,
también es increíblemente práctico y sensato. ¿Qué hacer con un hombre así?
Trata de entenderle. No es que tenga una personalidad
cambiante, son simplemente caprichos lunares que atraviesan su conciencia, que
hoy están y mañana han desaparecido. Tanto entre esos cambios anímicos como
durante el tiempo que cada uno de ellos dura, Cáncer es fiel a su naturaleza.
Jamás se aparta de su molde básico, a pesar de los cambios de expresión que
modifican sus rasgos. Trata siempre de recordar que aunque sus modales puedan
ser rudos y distantes, el corazón del Cangrejo siempre es tierno y afectuoso, y
tan rebosante de sentimiento que es la causa de que a veces se sienta
vulnerable. Entonces se retira dentro de su concha (la que continuamente lleva
consigo), para protegerse por un tiempo de sus propias emociones. Pensarás que
es un verdadero cangrejo, y estarás pronta a abandonar cuando se refugie en un
silencio ofendido.
Pero cuando vuelva a asomarse cautelosamente para ver si
hay sol, volverás a sentir la tentación de acercártele. Lamentablemente, un
Cáncer puede ser de vez en cuando un perfecto aguafiestas capaz de hundir a todo
el mundo en la depresión y de calarte hasta los huesos con su lluvia de
pesimismo. Pero también en otros momentos resulta tan divertido como un
orangután con hipo. No me extraña que no sepas si encogerte de hombros o
abrazarle con ternura. Los cambios de temperatura de Cáncer dejan atónito a
cualquiera. Primero te hará estremecer con sus ojos helados, después te abrumará
con su dedicación. Se mostrará tanto más indiferente cuanto mas miedo tenga de
perder algo. Tal vez ese algo seas tú. Vuelve a decirle una y mil veces que eres
suya, porque para sus oídos las palabras de amor son música.
Claro que es posible que se sumerja en uno de sus ataques
de extravagancia en mitad de una escena de amor, en una noche de luna llena. En
el preciso instante en que tú te dejes llevar por los sueños más deliciosos, tal
vez él se ofrecerá a recitarte su poema favorito. Tú, suspirando, volverás a
recostarte en su hombro con los ojos cerrados, y él graznará algo así como: <<La
vaca es un animal / todo forrado de cuero / tiene las patas tan largas / que le
llegan hasta el suelo>>. Ello quizá te arranque violentamente del mágico
hechizo, pero es que
Y ya que ha salido el tema del dinero, si tú te cuentas
entre las mujeres a quienes les gusta pagar a tiempo el alquiler, has encontrado
al hombre adecuado. Ama la seguridad casi tanto como a ti. Es posible que le
lleves una pequeña ventaja, pero puedes considerar que tu peor rival es el
dinero, al que Cáncer perseguirá durante la mayor parte de sus días con una
dedicación que puede hacer pensar en el fervor religioso. (Es posible que las
noches le traigan otras cosas para perseguir.) No es el peor destino que podría
haberte correspondido. El dinero le ha fascinado desde que era niño, y para él
ahorrar será mucho mas atractivo que gastar. No es exactamente avaro, pero
digamos que no es probable que jamás le veas encender la pipa con un billete de
un dólar por hacer un truco de prestidigitación. Su sentido del humor rara vez
se ejercita sobre el frío tema del dinero; para el Cangrejo, el dinero no es
algo que mueva a risa. Probablemente, antes de haber aprendido el alfabeto ya
era capaz de hacer mentalmente una suma, y para los once años tenía decidido su
camino. No te sorprendas si descubres que todavía guarda, sin abrir, su primer
cerdito hucha. El tintineo de las monedas y el crujido de los billetes verdes le
calman los nervios, aunque no se jacte de la cotización de sus acciones. Es raro
que Cáncer ahorre dinero pensando en una mejor posición social. Lo hace por el
gusto de hacerlo, y hasta es probable que reste importancia a sus condiciones de
mago de las finanzas. Él no es mas que <<un muchacho pobre que trata de ganarse
la vida, y va tirando lo mejor que puede>>. Puede ser que te sientas tan apenada
por él que incluso te ofrezcas para conseguirle un préstamo bancario. No te
molestes en hacerlo, que probablemente él es uno de los accionistas.
Un signo de fuego en el ascendente puede provocarle algún
impulso a dilapidar, al que resistirá con valor admirable.
Aunque de vez en cuando ceda a alguno de esos impulsos
derrochones para levantarse el ánimo, ello no será en él un hábito. Y antes de
que empieces a tacharle de <<tacaño>> para tus adentros, has de saber que el
hombre Cáncer tiene una idea interesante de la economía. Preferirá llevarte a
cenar al mejor restaurante y que os atiendan por lo que paga, antes que ofender
su sensibilidad y su gusto con chuletas de cordero recocidas y un mal servicio
en un lugar de segunda categoría. Le parece una tontería gastar el dinero en un
abrigo de lana, cuando el armiño o la chinchilla se amortizarán solos con el
tiempo. En su opinión, un buen coche de marca y diseño clásico es mejor
inversión que uno mas barato que se te desvaloriza tan pronto has dado la vuelta
a la esquina. Para Cáncer, calidad y economía son sinónimas. ¿Has visto? Estaba
segura de que esto te devolvería el brillo a los ojos.
Hasta los nativos más poéticos y soñadores de este signo,
los que se pasan la vida inmersos en la música, el arte o algún otro empeño
cultural, tienen un nítido sentido del valor del dinero. Es posible que un
artista lunar pinte en un ático, pero no que necesite de la seguridad social. Es
probable que escondidos en las vigas haya unos cuantos bonos y acciones. Tampoco
hará donación de sus cuadros, los venderá a buen precio, si es un profesional.
Pero es que lo valdrán. Cuando un Cáncer se dedica a una carrera, es seguro que
llega a la cúspide. Está lleno de talento artístico. Le podrías sugerir a tu
amado Cáncer que te dibuje las tarjetas de Navidad. Aunque no sea mas que un
aficionado, serán encantadoras.
Si es un Cáncer auténtico, no enloquecerá por la ropa
deportiva. Su atuendo denotará cierta formalidad. No importa que pague por él
millones o unos pocos miles, su traje será de corte clásico e impecablemente
cosido. Es frecuente que le gusten los cuellos con botón (si, todavía los
venden: a los Cáncer), los puños con gemelos y las camisas caras, que compra al
por mayor y por lo general sin monograma (demasiado ostentoso; él prefiere pasar
inadvertido). Por más que durante un breve periodo, mientras amasa su primer
millón, pueda andar corto de dinero, llevará los zapatos lustrados y no le verás
nunca con los calcetines caídos. Durante cualquier período de incertidumbre
financiera (que en todo caso será transitorio), un varón Cáncer irradiará de
alguna manera un aire de digna riqueza, como de alguien que ha conocido días
mejores. Y si no los conoció, los conocerá, puedes estar segura. A sus manos
llegarán algún día sustanciales sumas de dinero, o encontrará la oportunidad de
ganarlas. No siempre será rico, pero un Cangrejo en paro es tan raro como un
cocotero en Siberia. Su lema secreto es <<quien juega y no trabaja tiene la
cartera flaca>>, y él la prefiere agradablemente regordeta.
Esperemos que sepas ganarte la simpatía de su madre o, más
bien, roguemos por que te la ganes. Es bastante seguro que ella aparezca con
frecuencia en la conversación de tu amado, en comentarios como: <<Mi madre jamás
usa tanto maquillaje, y es una mujer muy hermosa. ¿No te parece, cariño, que
llevas demasiada sombra en los ojos?>>. 0: <<¿Tú utilizas comidas congeladas y
todas esas cosas? Cuando yo era niño, mamá amasaba el pan en casa>>. También es
muy probable que ese dechado de virtudes se te aparezca en persona, cuando tú
menos lo esperes. <<Tesoro, esta noche no podré llevarte al teatro. Voy a llevar
con el coche a mamá, que se va a pasar unos días al campo. Digámoslo en forma
realista: es posible que Cáncer se resista a destronar a mamá para coronarte a
ti como su nueva reina.
Pese a todos sus ocasionales impulsos de vagabundeo, es un
Cangrejo tremendamente domesticado, y si su madre ha sabido hacer de su casa un
hogar, él no tendrá prisa por abandonarlo. Los Cáncer son muy apegados a la
madre, o bien se han alejado completamente de ella. La relación con ella nunca
es tibia. Los que no sienten reverencia por la madre son los adoptados, o bien
aquellos en que los celos ante el lugar que el padre ocupa en el afecto materno
han provocado un bloqueo emocional. En tal caso pueden exhibir una frialdad y un
aislamiento antinaturales.
Sin embargo, con el Cangrejo típico el problema más
probable es el contrario; de nada sirve recurrir a la política del avestruz. Si
te has enamorado del tipo mas común de Cáncer, tendrás que hacerte amiga de la
madre y ser su rival al mismo tiempo que la cubres de atenciones. No es fácil
cultivar una amistad a la vez que se compite, pero es la estrategia que tendrás
que usar. Jamás dejes que ella tome la delantera como cocinera y ama de casa.
Déjala que te enseñe a hacer el pastel de limón con merengue, pero después ve tú
sola y hazte por tu cuenta un estupendo Boeuf Stroganoff. Asegúrate de que le
malcrías por lo menos tanto como le malcría ella, que ya puede ser bastante. Es
probable que él haya crecido acostumbrado a sentirse la niña de sus ojos. Si lo
tienes muy en cuenta, le alimentas regularmente, le atiendes y no te separas de
él cuando esté enfermo, y por la noche le arropas tiernamente en la cama puede
convertirse en un tesoro de Cangrejo. Aunque ellos jamás lo admitirán, a los
hombres de Cáncer les encanta que las mujeres les cuiden y les mimen.
También hay ciertos rasgos que pueden equilibrar las cosas
en vuestra relación. Para empezar, él también será excelente cocinero, y es
posible que te sorprenda con su capacidad para preparar una exquisita comida.
Cuando este hombre invita a cenar en su apartamento, por lo general lo dice muy
en serio.
Incluso si te invita a ver su colección de aguafuertes es
posible que no haya segundas intenciones. El varón Cáncer típico adora las cosas
mejores de la vida; en una palabra, él está en la cultura. Es muy posible que
realmente tenga algunos excelentes aguafuertes, o por lo menos una estupenda
colección de discos. Y es bastante seguro aventurarte sin otra compañía en su
rocosa caverna, porque el hombre lunar típico es la esencia de la galantería con
las mujeres. Generalmente, Cáncer será un caballero mientras tú no dejes de ser
una dama. Así se hacían las cosas en los días de la abuelita, y para él esos si
que eran días. (Es probable que tenga sobre la chimenea la fotografía de la
abuelita.) Pregúntale por su árbol genealógico, que le gustará mucho que lo
hagas. A la mayoría de estos nativos les encantan los linajes y los antepasados.
Les fascinan las cosas viejas, desde la abuelita a esa mesa de guindo del siglo
XVIII que se trajo de su primer viaje a Europa.
Si te dice que quiere hacerte una fotografía, no salgas
corriendo. La fotografía es un pasatiempo común entre los lunares, y son pocos
los Cáncer que se pasan la vida sin tener por lo menos una cámara. Claro que
podrían tener a Venus en Escorpio o
Pero Cáncer puede pasar mucho tiempo sin invitarte a ver
sus aguafuertes ni su mesa de guindo. Si bien no se privará de flirteos
intrascendentes, pueden transcurrir años antes de que se enamore en serio,
porque para él no es fácil encontrar una mujer a la que considere digna de su
interés. Cuando la halle, la cubrirá de regalos y de admiración, pero sus normas
son exigentes y no cualquier chica puede satisfacerlas. La mayoría de los
Cangrejos tienen miedo de quemarse, y no sin motivo. Una pareja frustrada, que
para un hombre medio sólo sería causa de unas tristes semanas de readaptación,
para él puede ser un desastre. Cuando algo le separa de la pareja con la que ha
conseguido establecer intimidad, el duelo puede prolongarse durante muchos años.
Renuente por naturaleza a precipitarse, una vez que está
seguro no es fácil que Cáncer se eche atrás. Puede desempeñar hábilmente el
papel de enamorado romántico. Después que se te haya declarado y cuando tenga
alguna esperanza de conquistarte, su timidez se tornará repentinamente en
tenacidad y te encontrarás con un galán serio y decidido, que no aceptará el no
por respuesta para la decisión que ha tomado. Es probable que se te meta en el
buzón (en sentido figurado, claro), que acampe sobre tu felpudo y te monopolice
el teléfono. No es fácil escapar a la tenacidad del Cangrejo, ni tu querrás
hacerlo probablemente. Son muchas las chicas que sueñan con un mundo como el de
él, iluminado por la luna, para vivir y soñar; un mundo donde alguien las tenga
firmemente abrazadas y las proteja del lobo grande y malo que acecha en la
puerta.
Ahora que ya sabes que no es descuidado para vestir ni
derrochón, que probablemente será un cocinero de ensueño, que tiene excelente
gusto y anda en busca de una chica tradicional, como la chica con la que se casó
papá, y que puede ser un verdadero tórtolo (siempre que no esté con el ánimo
bajo), ¿qué otra información puedes necesitar? ¿Qué tal es como padre? Pues las
noticias son inmejorables. Todos los Cáncer son madre de corazón, hasta los
hombres.
Lo que quiero decir es que será un padre excelente, por esa
misma naturaleza atenta, gentil, tierna y comprensiva de la que tú misma te
enamoraste. Tendrá infinita paciencia con los niños y se interesará
auténticamente por cada dedito magullado, juguete roto o dolor de muelas. Se
pondrá un gorro de papel para las fiestas de cumpleaños, le adorarán todos los
chicos del barrio y se pasará las horas entreteniendo a los pequeños. Los papás
Cáncer se enorgullecen de sus hijos y velan con fiereza por sus hijas. Cuando
sean pequeños, será el mejor papito que puedas imaginarte, aunque las aguas
puedan enturbiarse un poco cuando llegue la adolescencia. Como le gustaría que
su progenie buscara para siempre apoyo en él, es posible que con los primeros
signos de independencia se vuelva a convertir en un Cangrejo lunático por un
tiempo, ante el deseo de los chicos de obtener su propia experiencia en el
mundo.
Se paseará por la sala hasta gastarse la suela de los
zapatos cuando Enriquito salga con el coche después de medianoche o cuando la
pizpireta Lucia no vuelva de la fiesta para el toque de queda. ¿Recuerdas cómo
le impresionan las cifras? Echa mano de la aritmética para hacerle ver que está
equivocado. Fíjate, cariño. Ahora tenemos dos hijos. Cuando se casen, podremos
tener seis u ocho nietos, como los dividendos en el banco. Y seis u ocho dan mas
felicidad que dos, ¿no?>>. (Ahí le ganaste.) <<Me alegro de que estés de
acuerdo. Ahora, ¿quieres decirnos por favor donde has escondido el vestido de
novia de Lucia, y sacarle a Enrique esas esposas, para que pueda firmar la
licencia de matrimonio?>> No lo intentes mientras haya luna llena, porque podría
interpretarlo mal; además, ningún Cangrejo puede pensar bien cuando las
vibraciones lunares son fuertes. Le resulta difícil renunciar a su dominio, pero
si le haces presente que todavía te tiene a ti para aferrarse, aflojará la
presión.
Bueno, para el futuro, eso es todo. Tu problema inmediato
es engatusar a tu Cangrejo para que avance directamente hacia una propuesta
matrimonial, en vez de pasearse astutamente de un lado a otro, esquivando el
asunto. Puedes hacer como que vas a dejarlo por uno de esos tipos audaces y
cavernarios. Generalmente, el Cangrejo dejará de andar hacia atrás cuando el
objeto –tú, en este caso– dé señales de alejarse. Pero eso requiere que busques
otro hombre, para que él se despierte. Y como él te vigila tan de cerca, puede
ser engorroso.
La manera más fácil de ponerlo en situación de que pique
con fuerza y se deje de juegos de salón es jugar con sus emociones, que están
siempre por debajo de la superficie de su mente de calculadora. La música, la
poesía, las flores, la ropa hermosa, los perfumes caros usados con discreción,
las palabras tiernas y las caricias son armas que irán desmoronando su débil
resistencia al romance. No olvides que hay una línea directa que comunica su
corazón con el estómago. Recorta de las revistas fotografías de bebés, deja
fuera la máquina de coser, de manera que se vea bien, levántate un par de
centímetros los dobladillos de las faldas y mímale un poco. Ponte una de esas
pulseras hechas con monedas extranjeras, que con eso le tocarás dos cuerdas
sensibles, la de los viajes a lejanas costas y la del dinero. Alguna noche te
preguntará impulsivamente si no te gustaría conocer a su madre. A la mañana
siguiente ya puedes con absoluta seguridad encargar las invitaciones y comprarte
el ajuar: no hay duda de que has ganado el corazón de un caprichoso hombre
lunar, lleno de mil sueños secretos, y la aprobación de la chica que él
prefiere. Ya puedes <<navegar durante un año y un día>>, mientras bailas a la
luz de la luna y comer con un pequeño tenedor para entremeses picantes.
¡Buen viaje! Y no te olvides: no se te ocurra tirarle ese
abollado sombrero viejo, ni las zapatillas aquellas de tenis, y tampoco la
colección de sellos o los boletines de la escuela primaria. Son sus tesoros. En
cuanto a ti, no te vayas sin paraguas, que algunas noches serán muy húmedas. ¿Me
permites que te diga que estás muy guapa con el abrigo de chinchilla? Pero
claro.
Si una mujer siempre está guapa cuando la aman... y a ti te
aman.
...Se desvanecen los ecos y los recuerdos mueren: las heladas
de otoño asesinaron a julio.
Todavía, como un fantasma, me obsesiona Alicia, moviéndose bajo
cielos que jamás han visto ojos vivientes.
De eso no cabe duda. Al comienzo, te costará darte cuenta
de si tu chica Cáncer es una gentil doncella regida por
Durante la estación de las lluvias, te ahogará con sus
pesares, y cuando el sol vuelva a asomar entre las nubes te hará doblar de risa,
y te conmoverá con su ternura. Ser testigo de sus cambios anímicos es como ver
una de esas antiguas películas mudas que anteponen un episodio de humor basado
en bofetadas histéricas a la patética historia de los Peligros de Paulina, todo
acompañado por la musiquita del piano en el foso de la orquesta. A veces, la
melodía es alegre y vivaz; otras se pone melancólica. La música es variable,
para acompañar las ocasiones, pero jamás aburrida ni monótona. Lo mismo pasa con
la muchacha Cáncer. Es un poquitín chiflada, un poco triste y muy imaginativa. Y
también sabe ahorrar los niqueles.
Naturalmente, no podrás mirar debajo del colchón mientras
no os hayáis casado. El pudor es una de sus condiciones. Pero puedes apostar sin
riesgo a que allí guarda un calcetín viejo, bien lleno de billetes verdes y
monedas de plata. Aún cuando tuviera un ascendente manirroto, seguramente
guardaría algunas monedas bajo la maceta de las azaleas, o tal vez reservadas
entre los pliegues de ese mantel de encaje que le regalaron hace diez años para
su cumpleaños, y que todavía no ha estrenado. Si abres uno de sus libros de
poesía, es posible que caiga de él un arrugado billete de un dólar, deslumbrado
por la luz del día. Una mujer Cáncer puede ceder a un súbito impulso de gastar
cuando la han herido y necesita mitigar el dolor de las magulladuras, pero
durante la mayor parte del tiempo sus gastos quedarán considerablemente por
debajo de sus ingresos. Es posible que muestre un especial interés por tu cuenta
de ahorros, y que el dinero sea uno de sus temas de conversación favoritos. No
te mirará con desdén si no lo tienes, siempre y cuando seas de la clase de
hombres que se esfuerza por conseguirlo. Ella te ayudará a ganarlo y a
ahorrarlo, pero mucho cuidado a la hora de gastarlo. No vayas demasiado lejos si
no quieres que ella tenga la sensación de que vuestra seguridad se desmorona.
Cuando le hagas a esta muchacha un regalo carísimo, y ella te diga que no
deberías haberlo hecho, no dudes que lo dice en serio.
Si quieres que deje de pensar en seguros, hipotecas,
alquileres, facturas y el saldo de su club en el banco, llévatela a la playa a
medianoche, a dar un paseo a la luz de la luna. Serán sus mejores momentos. La
luna hará aflorar todos sus sueños secretos, y es posible que la proximidad del
agua le haga olvidar todas sus inhibiciones. Es muy posible que en el espacio de
una hora veas toda la gama de sus emociones. Entonces, podrás elegir la que mas
te guste y darle ánimos para que la cultive.
Cuando salgas con una chica Cáncer típica a pasear solos
por una playa, bajo la luna llena, asistirás a una transformación extraña. Esa
dama fría y reservada que conociste durante el día, o esa muchacha desaforada y
tentada de risa que se te mostró alguna vez que la llevaste al teatro o a cenar
a un restaurante, se convertirá súbitamente en una criatura de otro mundo cuando
los magnéticos rayos de la luna iluminen sus ojos y sus oídos se llenen del
rumor de las olas. Se convertirá en una ninfa del mar, que puede elevarse
contigo tan alto como pueda llegar tu imaginación. Nueve veces de cada diez, el
sistema funcionará, y la décima será probablemente porque acertaste a elegir la
luna nueva. Con eso no lograrás lo mismo. Cuando la luna está en menguante, ella
se mostrará tímida y dulce, pero lo que necesitas en realidad es una luna lo
bastante llena como para movilizar todos sus talentos latentes. Bajo su hechizo,
en el momento justo de su propio flujo y reflujo de emociones, Cáncer puede
escribir un poema, componer una canción o desgarrar el velo de los misterios que
durante siglos han hecho cavilar a los filósofos. Naturalmente, es en esos
momentos en los que su conversación es interesante, por decir lo menos.
Es necesario que sepas que hay dos variedades distintas de
mujeres Cáncer enamoradas. La primera es suave y femenina, tímida, modesta y
conmovedoramente temblorosa. La segunda es más bien pegajosa. Es de las que
usarán todas las tretas de Eva para sentarse lo más cerca posible de ti en el
reservado, cosa que si ella te interesa de veras, puede resultar muy fascinante.
Pero si tú solo estás en plan de amigo y ella te toma deliberadamente de la mano
o te besuquea las mejillas en el momento mismo en que pasa por ahí la chica de
tus sueños, es posible que el juego pierda un poco de gracia. Puedes seguir con
la broma, pero conozco a alguien que lo hizo y la otra chica, interesada en
serio y que no estaba jugando, pasó de largo. Y él se quedó en las garras de un
Cangrejo presa de un ataque de risa. Este tipo de mujeres Cáncer pueden ser un
verdadero peligro para el auténtico amor y la felicidad de un hogar, aunque por
suerte son una minoría. Aun así, una es suficiente para causar mil problemas.
Como ya lo sabes por los otros signos solares, son pocas
las mujeres perfectas. La mujer Aries siempre andará llamando ella sola su taxi
y dándose de cabeza contra muros de ladrillo, Sagitario te hablará con una
franqueza totalmente chocante, Escorpio puede asustarte, ser versátil Géminis y
demasiado orgullosa Leo, y así sucesivamente. En las mujeres Cáncer por lo
general no encontrarás estos defectos.
Sin embargo, también hay algunas normas que no debes
olvidar con ellas. Cáncer no soporta que la critiquen, se siente profundamente
herida por el ridículo y, simplemente, no puede aguantar que la rechacen. Una,
dos, tres: son reglas básicas. Es raro que se muestre abiertamente agresiva; la
nativa típica es vacilante, y la primera jugada tendrás que hacerla tú. Si por
casualidad ella llega a moverse, lo hará hacia atrás o de costado. Con la
timidez propia de su naturaleza, y el temor de no ser aceptada, es un eco del
varón del mismo signo solar.
Sé de un hombre y una mujer de este signo que se pasaron
siete horas, una noche, sentados uno junto a otro en el apartamento de ella,
como si no les interesara otra cosa que mirar revistas. Mientras sus corazones
latían silenciosamente, ellos examinaron una pila de números atrasados, el
periódico de la mañana y el de la tarde, y resolvieron unos cuantos crucigramas.
Ninguno de los dos quería dar el primer paso.
Si no eres bondadoso y atento con su madre, no te lo
perdonará. Mamá es una dama, y a su hija no le gusta que la insulten. Aunque las
chicas Cáncer tienen sentido del humor, no reaccionan favorablemente a los
chistes sobre la suegra. Tampoco quieras leer nunca su diario de cuando tenía
cinco años, aunque es casi seguro que lo tendrá bajo llave. A Cáncer le gusta
guardar secretos, y no esperes de ella confesiones auténticas, a menos que quien
se confiese seas tú.
Los miedos de tu lunar amada pueden mantenerte realmente
con el alma en un hilo, lo mismo que a ella. Tiene miedo de no ser lo bastante
bonita, de no ser lo bastante inteligente, de no ser suficientemente joven o
suficientemente vieja. No importa que tenga la silueta de
Aparte del miedo,
totalmente injustificado, de su falta de habilidad culinaria, quizá tema que tú
no la quieras bastante. Eso no es difícil de remediar para ningún varón
con sangre en las venas. Adelante, demuéstraselo todas las veces que quieras,
que ella estará totalmente receptiva. Una vez que le hayas encendido la luz
verde, ella se sentirá feliz de reconocer la señal, y aunque eso puede borrar su
complejo de inferioridad, te creará otro problema. A decir verdad, después que
la hayas conquistado, una mujer de Cáncer puede mostrarse un poco tenaz...
digamos que no te soltará mientras viva, lo que no está nada mal. Hay hombres
ávidos de lealtades así. Cuando hayas tenido la suerte de ganarte su amor, jamás
estarás falto de comida ni de afecto. Y la sonrisa chiflada con que te los
ofrecerá también tiene su encanto. Su rico humor se te hará más cálido y mas
querido cuando pienses en todas las sirenas sarcásticas que andan por el mundo
con su ingenio cínico y su risa hipócrita.
Es bárbaramente injusto jugar con el corazón de una chica
de este signo, porque ella te amará, te honrará, te obedecerá y te fastidiará un
poco con devoción sincera. ¿Por qué dar alas a un amor así si no tienes la
intención de corresponderlo con el mismo ardor? Recuerda la tenacidad de Cáncer.
Es posible que tú no hagas más que flirtear, pero tendrás graves problemas
cuando quieras dar por terminado el partido: ella no oirá el silbato. En los
sentimientos de una mujer Cáncer no hay nada de superficial ni trivial. Cuando
llega a ser dueña de un hombre, o de una taza de té, es para siempre.
Es posible que no impresione a tus amigos con su vivacidad
y su chispeante capacidad de halagarlos, pero a ti no dejará de seducirte con su
encanto. Las mujeres de julio prefieren reservar sus emociones mas profundas
para la gente que sienten más próxima. Después que hayas salido con otras chicas
y las hayas comparado con ella, es posible que vuelvas corriendo hacia tu
Cangrejo hembra, y le pidas que te aferre otra vez. Y con fuerza.
En el trato con ella, lo más difícil es evitar que se
refugie en el caparazón impenetrable del Cangrejo, siempre tan a mano.
Sus sentimientos son tan sensibles y tiernos que la más
leve observación, hecha sin intención alguna, puede producirles una profunda
herida. Es difícil saber cuando la ha vulnerado súbitamente algún significado
oculto. Es posible que alguna noche llegues a visitarla y le digas: <<Que
hermoso es tu cabello>>, y veas que se le llenan los ojos de lágrimas. ¿Por qué?
Porque la última vez que estuviste con ella le diste a entender que el pelo se
le veía espantoso. Las mujeres Cáncer pueden ser muy quisquillosas y llorar
bastante. No te olvides de tener siempre un pañuelo a mano.
Las mujeres nacidas bajo el signo del Cangrejo no son
necesariamente tacañas, pero tienen sus hábitos ahorrativos.
Hasta se diría que es lisa y llanamente una compulsión. Es
raro que una mujer lunar se deshaga de trozos de hilo, botones, frascos, latas,
maridos o patrones viejos para vestidos. Y ¿quién eres tú para decir que no
sirven de nada esas entradas de teatro rotas, esas viejas cartas de amor o las
bolsitas de té usadas? Algún día de ese imprevisible futuro, es posible que le
sirvan para algo los fusibles quemados que guarda en el cajón, con los adornos
de Navidad rotos. No le preguntes que empleo piensa dar a esas doscientas medías
y guantes desde hace tiempo divorciados de sus parejas. "¡Ya lo encontrará,
descuida! Cáncer no es mujer que tenga paciencia con quien le queme con el
cigarrillo el cubrecamas acolchado que heredó de la tía abuela Matilde. Para
ella, todo tiene un valor sentimental, incluso los cheques vencidos de 1952 y
las viejas insignias de cuando estuvo en la organización de Girl Scouts. Atesora
y guarda celosamente las cosas que tiene, y entre ellas a ti, naturalmente. Y no
tanto porque sea celosa; es más que nada posesiva, que es diferente.
Es posible que las mujeres nacidas bajo los signos de fuego
se resistan y protesten ante las demoras y las decepciones que trae la vida,
pero Cáncer tiene por lo común la sensación de que alborotándolo todo no se
puede cambiar ni superar nada. Cuando las cosas no van como ella quisiera, es
posible que derrame algunas silenciosas lágrimas furtivas, pero su reacción
normal será cruzar serenamente las manos y esperar con paciencia a que las cosas
se arreglen solas. La paciencia es una de sus mejores virtudes. Cuando está
deprimida, sin embargo, es posible que seas tú quien tenga que encontrar la
manera de salvarla de sí misma. Trata de rescatarla antes de que se haya hundido
demasiado. Además, en cierto modo ella quiere que la mimen. El deseo de dejarse
malcriar un poco por los seres amados parece tener hondas raíces en la
naturaleza de los Cangrejos. Tu muchacha lunar necesita desesperadamente saber
que tú no puedes vivir sin ella, y puede llegar muy lejos para despertar tu
piedad y tus instintos protectores, simplemente para asegurarse de lo mucho que
significa para ti. Para ella es en realidad muy poco pedir, cuando es tanto lo
que da a cambio. Pero durante estos episodios, no te dejes engañar por su
debilidad.
Ese bebé desvalido que contra un mundo frío y cruel busca
la protección de tus fuertes brazos es perfectamente capaz de valerse por sus
propios medios si es necesario. En medio de una rencilla, cuando ella levante
hacia ti sus transparentes ojos húmedos y asustados, recuerda que cuando tú te
vayas y ella esté segura de que ya has dado la vuelta a la esquina, lo mas
probable es que se seque los ojos, ponga una pila de discos en el automático y
se dedique tranquilamente a ordenar los armarios. Claro que es cierto que en
ocasiones su depresión es auténtica, y no una simple búsqueda de simpatía,
típica de Cáncer. Esas noches será mejor que te quedes, que escuches música con
ella y la tomes tiernamente de la mano.
El heroico sacrificio de que es capaz una mujer Cáncer por
aquellos a quienes ama no reconoce límites. La bravura que aparentemente no
puede reunir para vencer sus propios temores se muestra, resplandeciente, cuando
un ser querido necesita de su fortaleza. Cuando las cosas se pongan realmente
difíciles, no te abandonará jamás, y entonces te recordará mas a una roca,
áspera y gigantesca, que a un tenue rayo de luz plateada. También sus hijos
encontrarán en ella un refugio y una torre de fortaleza que con sensibilidad y
comprensión les ayudará a encontrar su camino. Serán muy apegados a ella, y lo
cálido de su amor hará que el hogar materno sea para ellos tan rico, confortable
y luminoso como un palacio, aunque fuera una choza. Es posible que tú te veas un
poco desatendido cuando lleguen los bebés, pero es que Cáncer rige la
maternidad, imagínate. Seguirá habiendo lugar para ti, si bien te verás
desplazado unos centímetros. (Si no tiene hijos, una mujer Cáncer pondrá en un
animal o en sus amigos su reserva de afecto maternal, para mejor suerte de
ellos.) Como hacen los pájaros con sus crías, es posible que les dé de comer
cada vez que los encuentra con la boca abierta, ofreciéndoles algo rico y
nutritivo.
Para su familia, nada le parece demasiado bueno. Cuando uno
de los chicos estornude, lo meterá en cama con medicinas, té caliente y caldo de
gallina, mientras no tenga edad suficiente para defenderse. Los hijos de una
madre Cáncer no conseguirán salir sin ponerse el pullover grueso cuando haga
frío, la bufanda y los mitones si ha nevado y las galochas cuando llueva.
Un niño tiene que tener una fuerza de voluntad enorme para
defenderse de la solicitud protectora del Cangrejo, y también necesitará
bastante firmeza para no dejarse malcriar. Para estos niños suele ser todo un
choque el contacto con el mundo, que les lleva a descubrir que no son ellos el
centro del Universo.
Una dedicación y una devoción tan completas pueden
proporcionar a la prole un maravilloso lecho de plumas y fuente de seguridad
para cuando la vida llegue a ser demasiado real, pero también pueden hacer que
los hijos sean dependientes en un grado anormal de los vínculos hogareños, e
incapaces de ver sus propias faltas. Muchas veces es imposible decir si es la
madre Cáncer la que mantiene a los hijos atados a sus faldas, o si son ellos
mismos los que aseguran el nudo. Son madres que guardan todos los cuadernos de
la escuela, cuelgan orgullosamente en las paredes torpes dibujos a lápiz y
conservan con ternura los zapatitos envueltos en papel de seda. Esos ajados
trozos de cabritilla blanca son preciosos, porque la madre lunar, con su memoria
clara y fotográfica, recordará los primeros pasos de un niño mucho después de
que éste haya volado del nido. También el vuelo suele ser doloroso. Las mujeres
de este signo se resisten a dejar que sus hijos asuman los lazos matrimoniales.
Tienden a sujetarlos demasiado y durante demasiado tiempo, y les parece que
nadie es suficientemente bueno para ellos. Hay veces en que la novia –o novio–
en potencia del hijo de una madre Cáncer tiene que pasar poco menos que por el
test de Rorschach para ser aceptado.
Conocí una vez a una madre Cáncer que solía ir a buscar
todos los días a su hijito a la salida de la escuela. El niño salía siempre del
aula como propulsado por un cohete y empezaba a correr furiosamente por el patio
de la escuela, antes de acercársele. Una vez que fue en compañía de su hermana,
la tía empezó a correr tras el niño, pero la madre Cáncer la detuvo. <<No,
déjalo –le dijo–. Está soltando presión. Cuando ya no necesite correr, vendrá>>.
Finalmente, el hijo se le acercó tranquilamente y le dijo, tomándola de la mano:
<<Vamos mami, que tengo hambre>>.
Este episodio resume toda la actitud de la mujer lunar
hacia todas las formas de amor, y muy especialmente hacia su matrimonio. Es su
extraña forma de posesividad, inconmovible, pero nunca agresiva. En lo profundo
de su corazón, ella sabe que por mas lejos que te vayas en pos de tu sueño,
siempre volverás, y ella estará ahí, esperándote pacientemente. Sus ojos
seguirán teniendo la belleza de la mágica Luna que tú recuerdas, de la cocina
llegará el delicioso aroma de las especias, y ella te preguntará que tal fueron
las cosas, y como te sientes. Si algo te fue mal y vuelves derrotado, ya
encontrará ella la forma de hacerte reír. Después te llenará el estómago y,
cuando ya estés relajado, ahuyentarás suavemente tus preocupaciones con sus
consejos sensatos y su humor imaginativo. Mas tarde, cuando a la luz del fuego
mires ese rostro sereno, volverás a preguntarte: <<Realmente, ¿es la doncella
lunar de algún jardín nebuloso, o es una encantadora chiflada?>>. Pero la
respuesta ya no te importará mucho.
¡Ay, ay, ay, que raras son hoy todas las cosas!
y ayer todas fueron nada más que lo habitual.
Escríbetelo para que lo recuerdes y no vuelvas a
sorprenderte todos los días de tu vida: el estado de ánimo de tu bebé Cáncer
cambiará con tanta frecuencia como tú le cambias los pañales.
Para el pequeño lunar, este mundo es un lugar nuevo y
extraño, donde lo fascinan las cosas deliciosas que hay para comer y beber, y le
encantan todas las imágenes coloridas que pasan ante sus despiertos ojitos y
quedan fijas en su memoria indeleble. Lo que experimenta ya no le abandona.
Cuando sea viejo y de pelo gris, tu hijo Cáncer recordará hasta el último
sentimiento y emoción, y podrá dar una imagen exacta de él.
Una de las mujeres Cáncer más encantadoras que he conocido
nació en Europa y, cuando estaba enferma, cantaba hasta la última palabra de las
canciones de cuna rusas que había oído de niña, aunque hacia ya casi medio siglo
que estaba en Norteamérica. La mayoría de nosotros apenas si recordamos la
melodía o las palabras de nuestras canciones de infancia.
Desde que desayuna hasta que se acuesta por la noche, la
mente del niño Cáncer estará ocupada registrando lo que ve y lo que oye. Para
los adultos de este mundo es difícil seguirle cuando trepa a la montaña lunar de
sus sueños, o acompañarlo mientras vadea las corrientes de su imaginación
luminosa. Sus emociones son intensas, coloridas y variadas, pero pese a todo
muchas veces es un solitario.
Jugar con los bebés lunares puede ser divertidísimo. Son
criaturas muy graciosas, de expresión extraña y ojos que hablan por sí solos.
Sus facciones se mueven constantemente por efecto de la risa, la sonrisa o las
lágrimas. Es interesante observar esas expresiones elásticas, pero más de una
vez desearás que fuera mas fácil saber cuando se reirá y cuando se quedará
mirando con esa mirada lejana mientras escucha la extraña música que oyen todos
los niños lunares.
Son criaturas con muchas más necesidades emocionales que
los niños Piscis. Mucho más que con ningún otro niño, con los Cáncer la
influencia mas fuerte es siempre el temprano medio familiar. Desde la infancia
hasta la adolescencia, los Cangrejitos se muestran tremendamente dependientes de
las reacciones de sus padres y hermanos. Es posible que tu hijo lunar sea
demasiado tímido para expresar sus verdaderos deseos, pero en secreto quiere que
le atiendan, le mimen y le adoren. Si en su familia y sus amigos no encuentra la
atención y la aprobación que necesita, el rechazo puede aplastarlo, simplemente.
Tengo una amiga muy íntima que nació en julio. Una noche, tarde, en la cocina de
su casa (¿dónde, si no?) estábamos hablando de su infancia y ella me contó que
cuando era pequeña y estaba en la escuela primaria, los padres le daban diez o
quince centavos por semana para gastar, pero ella nunca los gastaba; los
ahorraba para poder conceder un premio.
<<¿Premio por qué?>>, le pregunté.
La maravillosa expresividad de sus facciones reflejo un
ramalazo de tristeza. <<Bueno, es que a fin de mes solía ofrecer cincuenta
centavos al amigo que me había tratado mejor>>.
Al principio, la cosa me divirtió y le hice pensar en todos
los caramelos y placeres de que se había privado al dedicar toda su asignación
semanal a premiar al que mejor la trataba, pero vi en sus ojos algo que me hizo
callar.
Aunque durante la adolescencia tus pequeños Cangrejos
puedan ser durante un tiempo rebeldes sin causa, por lo general durante los
primeros años son fáciles de manejar y de corregir. Como para el Cangrejo su
vida anterior es muy real, puede estar feliz jugando solo durante horas. Hasta
es posible que tenga un compañero de juegos invisible, con un nombre tal como
Boris o Betty, que le ayuda a amasar pasteles de barro, a plantar flores
imaginarias o a jugar a los vigilantes y ladrones. El ficticio Boris o la
fantaseada Betty son siempre bien educados y corteses. Siempre dejarán ganar a
su amiguito Cáncer y cederán sin protestas a sus deseos de liderazgo. A veces,
estos camaradas imaginarios desaparecerán durante semanas enteras, pero
regresarán tan pronto como un compinche del vecindario o un compañero de la
escuela, reales y vivos, hieran los delicados sentimientos lunares o se muestren
demasiado prepotentes con el niño lunar. Dócil y tranquilo como son la mayoría
de los de su signo, Cáncer es un signo solar de conductores. Pese a la ternura
de sus emociones y a la suavidad de sus modales, no sirven para secuaces. Hay en
ellos mucho individualismo e independencia de pensamiento.
Si tu retoño sigue la tendencia de la mayor parte de los
niños de julio, se saldrá con la suya y será un poco malcriado en lo
superficial. Sabe que el que no llora no mamá, y es capaz de ponerse bastante
lacrimoso cuando no le hacen caso o le tratan con aspereza. ¡Ya verás lo que son
lágrimas! Un niño lunar puede inundar la habitación con ríos de llanto; es como
si alguien hubiera dejado abiertos los grifos de la cocina. Y si con toda esa
humedad no consigue la ternura y la simpatía que necesita, el Cangrejito se
convertirá en un hombre o en una mujer de corazón árido y ojos secos, incapaz de
dar ni de recibir fácilmente amor, ávido de soledad, capaz de forjar muy pocos
vínculos cálidos y condenado a la reclusión en la vejez.
Cuando tienes a tu cargo un Cangrejito sensible, es
realmente urgente saber reír y llorar con él, y calmar sus miedos, de los que
estará demasiado provisto. Posiblemente tu niño lunar no reúna todos los miedos
de la lista, pero descuida, que tendrá unos cuantos. Es posible que le dé miedo
dormir a oscuras, sin que haya encendida una lucecita, que le asusten el fuego y
los fósforos o tenga miedo de los automóviles y de los ruidos. Pueden asustarle
los extraños, los animales grandes, las luces brillantes, las comidas que no
conoce, el relámpago y el trueno.
Muchos de estos pequeños lunáticos se ponen melancólicos
cuando llueve. Un chaparrón de otoño o de primavera puede tener efectos extraños
sobre su naturaleza: puede hacer que de pronto sienta deseos de escribir un
poema, pintar un cuadro o componer música. En otros momentos, puede inducirle a
esconder la asustada cabecita debajo de las mantas, mientras el trasero se
destaca, visiblemente tembloroso.
Son niños que necesitan mucha empatía emocional para
desarrollar sus bellas cualidades artísticas y creativas. Si no les falta
durante sus años formativos, eso les ayudará a convertirse en adultos pacientes,
generosos, serenamente seguros de sí mismos y de corazón abierto. Si se ven
privados de una atenta comprensión, su ternura y suavidad naturales pueden
deformarse, convirtiéndose en autocompasión y en constante cavilación, amarga y
silenciosa. El miedo, a menos que se le haga frente desde temprano, puede
convertirse en prejuicio ilógico y en odio. Los Cangrejos que se han visto
impedidos en su desarrollo afectivo suelen convertirse en seres desconfiados, a
menudo vengativos e incluso suicidas. En el mejor de los casos, esos hombres y
mujeres lunáticos y desdichados llevan una vida triste y monótona, a menos que
tomen la dramática decisión de dedicarse a levantar un imperio financiero o a
desarrollar un talento latente.
Cualquiera de ambas cosas puede sustituir
misericordiosamente el amor y el afecto que faltaron al tierno corazón lunar en
el momento en que era más vulnerable: en la niñez.
Nunca se insistirá demasiado en que estos niños tan
sensibles pueden imaginarse injurias o agravios, e imaginar un rechazo que jamás
existió. Hay que tener especial cuidado en convencerlos de que son buenos,
inteligentes, bonitos, despiertos, de que se les ama y se está contento de
ellos. Muchos padres lo intuyen, y por eso son tantos los Cangrejitos tan
mimados en su casa que se quedan atónitos de adultos, al comprobar que el mundo
se desinteresa bastante fríamente de sus deseos personales. No es de admirarse
que tantos Cáncer recuerden afectuosamente a mamá y le erijan poco menos que un
santuario a medida que se hacen mayores. Nadie mas, nunca, cuidará tanto de
ellos. Con un niño lunar, la cuestión es siempre no ser demasiado firme y
deformarlo, ni demasiado tolerante y malcriarlo.
Encontrar el punto medio nunca es fácil, y tal vez el
problema te cueste algunas noches de insomnio. La clave es relajarse. El amor
sabe por lo general encontrar el camino. La mejor fórmula es: una buena zurra, a
la antigua, cuando la necesite, y en todos los demás momentos muchos abrazos,
besos y expresiones físicas de afecto.
Normalmente, los maestros encuentran que los niños Cáncer
se destacan en historia. Es raro que se olviden de fechas o de acontecimientos.
Eso se debe a que, gracias a su sensibilidad de espejos, pueden leer algo
referente a un suceso acaecido hace mucho tiempo y creer así que ellos mismos
estuvieron allí. Si los héroes de nuestra historia pudieran regresar a contarnos
su vida, es probable que no lo hicieran de manera más vívida que la que tiene el
joven Cáncer de hablar de los hechos de un pasado lejano y polvoriento. Es como
si realmente hubiera asistido a la expulsión de los árabes, a la partida de las
carabelas de Colón o la comitiva de Juana
Es difícil que haya detalles que él sea incapaz de
imaginarse. No es de extrañar que sean tantos entre las chicas y muchachos de
este signo los que, llevados por su sensibilidad, se dedican al teatro, se
muestran creativos en la fotografía o se distinguen en una carrera musical o
artística. Es posible que algunas veces los maestros de jóvenes lunares se
quejen de que son testarudos o de que sueñan despiertos, pero habitualmente
ninguno de estos fallos es lo bastante pronunciado como para constituirse en un
verdadero problema. Es posible que haya cierta exageración: el chico puede
contar como le atacó un oso en el bosque para explicar los rasguños que se hizo
al caerse por los escalones del porche. La niña puede referir una patética
historia de padres crueles que la mandan a la cama sin cenar, cuando todo se ha
reducido a una discusión familiar de las más comunes. Pero cabe esperar algunas
historias fantasiosas cuando se piensa en la fuerte impresión mental provocada
por la lectura de relatos de aventuras sobre la imaginación lunar. Cuando su
corazón está realmente dolorido, en lugar de hacer de ello una tragedia
ficticia, el niño Cáncer típico tenderá normalmente a quedarse callado y a
negarse a hablar del asunto. Como dice un viejo proverbio chino: <<El que
realmente está herido, no habla>>.
Como los niños Libra, los pequeños cangrejos pueden elevar
a cifras fantásticas el presupuesto de alimentación de la familia, y no es raro
que haya que calmar sentimientos heridos por sobrenombres del estilo de
<<Tripitas>>. También, si el niño tiende a ser muy nervioso o caviloso, es
posible que el apodo sea <<Flaco>>. Con los niños lunares, es mejor omitir todos
los apodos. Jamás hay que burlarse de un Cáncer.
La mayoría de los jóvenes cangrejos esperan con ansiedad
poder tener un trabajo pagado, y andarán por el barrio en busca de pequeñas
tareas para hacer. Es posible que tu vástago Cáncer empiece desde muy joven a
cortar el césped, barrer las hojas o hacer de canguro. Reunirá botellas para
venderlas, ayudará a tender la ropa lavada, venderá limonada en la esquina o
hará cualquier otra cosa que se le ocurra y que le haga tintinear alguna moneda
en sus bolsillos. Empezando por las moneditas y acabando por los dólares, de
todo lo que gane llevará una perfecta contabilidad, y ahorrará una buena parte.
Después de un tiempo, quizá tú también empieces a ahorrar un poco... de su
asignación semanal. Probablemente él se gane el dinero para sus gastos antes que
otros niños, y se enorgullecerá de ello.
En muchos sentidos, encontrarás que económicamente te hace
la vida más fácil. Son jóvenes que muchas veces trabajan mientras hacen sus
estudios universitarios. Los varones tendrán una sana curiosidad acerca del
mundo de los negocios, y también las niñas se manejarán bien en cuestiones de
dinero, aunque dedicarán igualmente su tiempo a jugar con las muñecas y hornear
bizcochitos, como práctica para su futura profesión de madres.
El niño Cáncer te divertirá con sus bromas y su risa
contagiosa. Puede hacer caras tan graciosas como máscaras de Carnaval, y es
capaz de ver el humor en los diversos aspectos del desfile de motivos humanos.
Dale, si es posible, un pedacito de tierra para que la cultive, donde pueda
plantar algo como jardinero nato que es, y verlo crecer. Se interesará
tiernamente por los familiares enfermos, por los problemas económicos de la
familia y por las dificultades de amigos y vecinos. Los jóvenes regidos por
Es posible que al apagar las luces, cuando los acuestas, te
hagas la pregunta que todos los padres se hacen, sobre el día, en un futuro no
demasiado distante, en que la cabecita que no termina de levantarse para pedir
<<un poco mas de agua>> ya no este. La casa estará entonces silenciosa y faltará
en ella la alternancia de sus risas y sus lagrimas, después que el Cangrejito,
gracioso e imaginativo, se haya ido a formar su propia familia.
¿Se olvidará? Pues, si nació a fines de junio o en julio,
no.
Podrán pasar los años, y el podrá navegar por los mares
lejanos, pero tu puedes guardarle sobre la cómoda su alcancía, la que te dio
aquel sábado que reñisteis. Y a ella, tenle siempre la muñeca de trapo en la
butaca junto a la ventana. A lo largo de los días, tu retoño lunar volverá
muchas veces a casa, en busca de viejos recuerdos y para retornar al pasado. No
importa cuantos kilómetros le separen del ayer, en cualquier lugar donde viva
siempre está cerca de casa. Mantén provista la lata de bizcochos.
–Ya ves –prosiguió tras una pausa–,
que más vale tenerlo todo previsto.
Por esa razón el caballo tiene todas esas tobilleras en las
patas.
–¿Pero para qué son?
–preguntó Alicia, con tono de gran curiosidad.
–Para protegerlos de la mordedura de los tiburones –contestó el
Rey.
Ahora que conoces el sentido del humor de los Cangrejos,
tal vez tengas la impresión de que la oficina de un jefe Cáncer es un lugar
realmente divertido, donde no faltan más que los confetis y un sommelier que
sirva el champaña. Todos los empleados muy serios, y el ejecutivo lunar el
cómico de las respuestas breves y rápidas. Será como trabajar todas las noches
en una discoteca. Bueno, pues... no exactamente.
Si trabajas para alguien que esté en el mundo del cine o de
No es mi intención asustarte haciéndote pensar que sea un
ogro (aunque por el mundo hay algunos jefes Cáncer que lo son). Quiero decirte,
simplemente, que si tu jefe es un Cangrejo, tu trabajo estará mas seguro si
cuidas la raya del pantalón, la pulcritud del peinado y la rapidez con que
funcione tu cerebro que si le haces unas cuantas bromas e intentas ocupar el
papel de coprotagonista. El protagonista es él, y si tu intención es
impresionarle, mas vale que sepas que deja todo el humor de lado cuando se
sienta tras su escritorio de caoba lustrada, con el retrato de la madre a un
lado y al otro una fotografía de su familia reunida. No es prudente hacer
chistes cuando uno tiene un jefe Cáncer. Conozco un empleado que cometió un
grave error al dar la fecha de un envío a un cliente importante. Cuando su jefe
Cáncer, muy bondadosamente dispuesto, le llamó para que diera explicaciones
sobre el asunto, nuestro hombre le dijo alegremente: <<Jefe, ya se que cometí
una estupidez, pero si me da un par de días ya se me ocurrirá alguna excusa
excelente>>. Tal vez la ocurrencia hubiera sido un éxito en el antiguo vodevil,
pero a su jefe no le hizo ninguna gracia, y al chistoso le costó el despido.
Esperemos que tú aprendas sin tener que sufrir la misma
experiencia: el jefe Cáncer está en el mundo de los negocios con un solo fin,
que es hacer dinero. Y punto. Dinero. Algo hecho de papel impreso, de distintos
colores y con números diferentes, que significa la cantidad de poder, prestigio
y lujos que se pueden comprar. Y eso se consigue trabajando mucho.
Cuanto mas trabajes, mas rectángulos de papel impreso en
colores conseguirás, y con números mas altos. Tal es, en síntesis, la filosofía
del Cangrejo, y será prudente que tú también la adoptes.
¿Conque te parece un poco estirado, no? Tal vez pienses que
si se relajara un poco más, fuera menos estricto y creara una atmósfera más
amistosa, no solo tendría más éxito, sino que seria más feliz también. ¿Es eso
lo que se te ocurrió? Echa un vistazo a un ejemplar del Quien es quien, referido
al mundo del comercio y de la industria. Los cumpleaños estivales serán los que
predominen, y los de julio sobre todo. Después fíjate de nuevo en los nombres de
Cancerianos que figuran al final de la sección <<Como reconocer>> a este signo
solar. Comprobarás que tu cangrejo no debe de estar tan equivocado.
No importa a que negocio se dedique, el ejecutivo Cáncer
está realmente en su elemento cuando se trata de traficar, ya sea en caballos o
en calcetines, y en cualquier otra cosa que se te ocurra. Es un maestro en el
arte de captar lo que gusta a la gente, y de ofrecérselo con sustanciales
beneficios.
Hasta es posible que el canto de sirena del dinero le haya
apartado de la educación que él mismo quería, y que sea un autodidacta. Y si no
es así, puedes jugarte tranquilamente un mes de sueldo a que mientras iba a la
universidad, tenía algún trabajo de dedicación parcial e iba reservando sus
ahorritos. ¿A la universidad, he dicho? Lo más probable es que su primer empleo
lo tuviera a los seis o siete años, cuando iba a buscar el pan o la leche a la
vuelta de la esquina y le cobraba a su embelesada mamá una monedita por viaje.
Pregúntale cuando tuvo su primer trabajo asalariado, y es probable que te quedes
atónito. Pero así mejorarás tu imagen a los ojos de él; te respetará, y
mentalmente tomará nota de que sabes pensar. De paso, ten cuidado con esas notas
mentales que él toma, porque tiene una memoria de elefante. Es raro que un jefe
Cáncer se olvide de algo, y eso incluye a que hora llegas, a que hora te vas y
cuantas veces vas a lavarte las manos mientras estás en la oficina.
Pero también se acordará de las noches que te hayas quedado
después de la hora de salida y de la vez que trabajaste todo el fin de semana
para ayudarle a terminar un contrato importante, y entonces te recompensará, no
solamente con justicia sino incluso con generosidad.
Aun en los casos en que haya heredado su fortuna y su
cargo, es raro que un jefe Cáncer se conforme con los laureles de la familia; él
tiene que demostrar que es capaz de llenar, solo, su bolsa de oro. Sin embargo,
no hay que creer que es codicioso; es capaz de auténtica compasión y caridad,
sin que por eso sea ingenuo. Para el, la caridad empieza por su propia casa. Su
familia es lo primero, y después su negocio. Después vienes tú, y todos los
demás. Nadie puede tener el corazón tan grande ni mostrarse económicamente tan
generoso cuando el beneficiario lo merece, y cuando realmente no puede obtener
ayuda en ninguna otra parte. Entonces, el Cangrejo hará su gesto... y no será
mezquino. Acuérdate de que hay gran diferencia entre una franca caridad y una
especulación osada. El Cangrejo tiene el corazón tierno, pero mentalmente no
está reblandecido.
En realidad, tu jefe Cáncer es una persona profundamente
sensible, delicada y fundamentalmente insegura. El éxito calma muchos de sus
íntimos temores; por eso lo persigue con tal dedicación. Cuando está herido, lo
cual puede suceder con más frecuencia de la que tú te imaginas, se refugia en su
caparazón. Esa es también la defensa de Cáncer cuando no consigue lo que quiere,
y es frecuente que le dé resultado. A la gente siempre le apena ver al Cangrejo
que se ha retraído en el interior de su caparazón, y a veces le prometen
cualquier cosa para conseguir que vuelva a salir.
También hay muchas ejecutivas de Cáncer. Será raro que
encuentres una mujer de este signo que no haya trabajado alguna vez en su vida,
que no esté actualmente trabajando... o que no sea actualmente jefa. Es posible
que esté enamorada del amor, pero el amor tendrá en el trabajo un rival muy
capaz de vencerlo. Aunque a veces crean lo contrario, estas mujeres no son
felices con alcanzar únicamente la seguridad afectiva. Para Cáncer, la felicidad
es una mezcla de dinero y de afecto, en partes iguales. De todas maneras, es
probable que los Cangrejos hembras no soporten el trabajo de la casa. Es lo que
sucede con la mayoría de las mujeres Cáncer, y si has oído decir otra cosa, es
por lo mucho que les gusta la cocina. En realidad, son mujeres que prefieren,
con mucho, competir en un mundo masculino, pese a la vulnerabilidad de sus
sentimientos, antes que aburrirse con la rutina diaria de barrer y sacudir, y
sacudir y barrer, pasando de vez en cuando un trapo húmedo al suelo para no caer
en la monotonía. No les gusta admitirlo, y por lo general hacen de su casa,
limpia o sucia, un lugar bastante agradable, pero les desagrada ser amas de
casa. Lo que tal condición conlleva en cuanto a brindar afecto y protección les
parece muy bien, pero pueden pasarlo estupendamente sin sacar brillo a los
muebles. En casi todos los aspectos, las mujeres ejecutivas no se diferencian
esencialmente de los hombres, con una excepción: las Cangrejitas no usan
pantalones, camisa blanca y corbata. Lucen una dulce sonrisa para ocultar la
ternura de su corazón y la dureza de su mente, y por lo general la completan con
una vestimenta romántica y femenina.
Todos los jefes Cáncer tienen una notable penetración para
lo sentimental. Comprenderán todo lo que digas con una precisión inquietante, y
lo más desalentador es que son también lo bastante intuitivos como para captar
el sentido de lo que dejas sin decir... de manera que mucho cuidado con lo que
te callas.
Cáncer no es un auténtico solitario. Es posible que a
veces, cuando está en un periodo caprichoso o de depresión, actúe como si lo
fuera, pero habitualmente le gusta rodearse de gente. A la mayoría de los Cáncer
les asusta la soledad, salvo a los que la han buscado para cicatrizar heridas
muy profundas recibidas en sus primeros años, y aun ellos se sienten muy mal
estando solos, aunque conscientemente no se den cuenta.
Será positivo para ti trabajar para un ejecutivo Cáncer.
Con él aprenderás mas en un mes de lo que aprenderás en un año con otros jefes.
Ante todo, aprenderás de él consideración. Un jefe Cáncer mantiene un difícil
equilibrio, pero consigue ser justo al mismo tiempo que astuto. Una cosa es
jugar al juego de todo o nada con los grandes hombres del comercio y de la
banca, y otra es aprovecharse de un inocente. Cáncer es esencialmente bondadoso
y honesto, y tanto la crueldad como el infortunio le conmueven profundamente.
Para él, cortesía y compasión no son palabras anticuadas: forman parte de su
código caballeresco. Si tus intenciones son sinceras, tus motivos serios y tu
corazón honrado, contarás con su apoyo a pesar de tus errores y tus problemas
personales.
El Cangrejo espera pacientemente y con tenacidad, con los
ojos bien abiertos. Aunque su mentalidad práctica está siempre alerta, su
corazón sueña, y sus sueños son tan mágicos como la luz de
En cuanto al chiste que se te ocurrió, procura contárselo
durante el almuerzo, no en horas de trabajo. Si es un buen chiste, sobre gente
común, se reirá, y entonces descubrirás como es él en realidad. Mírale los ojos
y verás que la risa lunar es una respuesta clara y valiente –de la que solo es
capaz el Cangrejo, con su corazón tierno y su caparazón recio– a sus miedos y
resquemores internos.
Y sacaron toda clase de cosas...
y todas empezaban con...>>:
...
laberintos y lucideces...
Siempre es bueno tener trabajando para uno a un Cáncer,
porque realmente trabaja para uno. No trabaja por la gloria ni por ninguna
nebulosa quimera, ni acude cada día a la oficina porque está entusiasmado con la
recepcionista. Cáncer jamás piensa en su trabajo como una forma de
autoexpresión, ni como una manera entretenida de pasar el rato entre un café y
otro. El trabaja por la razón más sencilla del mundo: por la seguridad. Y eso,
naturalmente, significa su sueldo.
Usted se dará cuenta inmediatamente de que el sueldo de un
Cáncer debe estar hecho de elástico. Debe estar continuamente estirándose. A
medida que pase el tiempo y que él tenga más experiencia, su lealtad esté más
probada y sus talentos y capacidades sean evidentes, el Cangrejo esperará más
dinero. Sus ingresos deben igualar siempre a sus gastos, y estos aumentarán sin
cesar. Y si su sueldo no está a la altura, se verá obligado a hacer algo que va
totalmente en contra de su naturaleza: dejar su trabajo para irse a otra parte.
Para el Cangrejo nunca es fácil dejar nada, ya se trate de cepillos de dientes,
postales viejas, cordones de zapatos, calcetines, muchachas, cargas de bolígrafo
vacías o trabajos. Cuando se afirma, vaya usted a hacerle mover. La fiabilidad y
tenacidad son los materiales que se usaron –y con gran prodigalidad– para
construirlo. Y le vienen muy bien para su ambicioso ascenso hacia el éxito. Es
posible que por el camino se sacuda, se estremezca y tiemble un poquito. Cuando
aparezcan los tiburones y sus emociones resulten heridas en lo vivo, pero todo
eso se mantendrá bajo la segura protección de su recio caparazón de decisión y
tenacidad.
Pese a la aparente suavidad del Cangrejo, Cáncer es un
signo cardinal, lo que significa que los regidos por él nacieron para asumir
responsabilidades para conducir, no para que les conduzcan. Mientras sea
necesario, aceptarán con docilidad la disciplina de un jefe, pero no olvide
usted que es lo que se esconde tras esa disposición a obedecer dócilmente las
órdenes. Cuando el Cangrejo sirve obedientemente, a lo que sirve en realidad es
a sus propios objetivos secretos. Y sucede que su trabajo es un importante
ladrillo en la construcción del gran edificio que está levantando. Tan pronto
como la sólida estructura esté terminada, él se encargará de dirigirlo. Dicho de
otra manera: su meta es un cargo de ejecutivo. Es una idea que ni por un
instante deja de tener presente, y mas vale que también la tenga presente usted,
por razones obvias.
Su motivación para ir uniendo esos ladrillos con una mezcla
tan fuerte no suele ser el deseo de poder. Lo que le impulsa a seguir adelante
no es el prestigio, como en el caso de Capricornio, la cabra, ni el ego, como
sucede con Aries, el carnero.
Él se ve impulsado a acumular dinero, y una inconmovible
posición de autoridad por muy diferentes razones. Cáncer necesita la
tranquilidad de saber que tiene el futuro asegurado, para poder terminar
relajándose y viviendo allí donde está su corazón: en el ayer. Y eso exige
dinero. Las antigüedades son caras, lo mismo que las enormes casas viejas y las
cenas de gala servidas con todo lujo. También para coleccionar autógrafos se
necesita mucho dinero, y los marcos dignos de encerrar los retratos de los
antepasados no son baratos. ¿Y la cantidad de monedas que hacen falta para
comprar un buen equipo de alta fidelidad para escuchar música clásica? Además,
es posible que el empleado Cáncer necesite sumas importantes para mantener a los
parientes que se han ido a vivir con él en momentos de estrechez, o para ayudar
a uno de sus vástagos, que quizá necesite más dinero por múltiples razones.
Aparte, el Cangrejo tiene mil y un miedos, entre reales e imaginarios, que
entretejen una complicada red de fastidiosas dudas y sentimientos de
inadecuación. Y todo eso se calma con autoridad y liderazgo, de la misma manera
que la novocaína calma el dolor.
Hay una cosa más que necesita el Cangrejo: afecto.
Naturalmente, eso no es responsabilidad de un jefe, pero es importante que usted
lo sepa. Es posible que algún día tenga que darle un apretón de manos y decirle
unas cálidas palabras de gratitud, en vez de ascenderlo. Claro que eso no será
un sustituto adecuado del dinero, pero es posible que le decida a seguir un
tiempo más con usted. A Cáncer le halaga que le reconozcan sus meritos, pero el
halago jamás igualará su ligazón sentimental con su saldo bancario.
Tampoco se vaya usted al otro lado y caiga en la costumbre
de decirle: <<Oiga, amigo, por el momento no puedo pagarle lo que se merece,
pero le tengo muchísimo afecto>>. La segunda o la tercera vez podría
interpretarlo mal; es decir, podría pensar que no es usted sincero. Tenga la
misma cautela con sus empleadas Cáncer, porque también es fácil que ellas le
interpreten mal. La mujer de este signo es retraída y tímida con los extraños,
pero sabe reconocer una señal romántica desde una distancia increíble y con
extraordinaria rapidez. Si está soltera, mas vale que usted también lo esté,
porque cuando aparezca en los ojos de ella esa mirada tiernamente posesiva, se
verá en graves problemas para zafarse del lazo. Y si está casada, lo congelará
con sus miradas o le dará respuestas cortantes hasta que vuelva usted a
mostrarse respetuoso. No escatime afecto a sus empleados lunares, pero trate de
mantenerse en un plano impersonal. Se que es lo mismo que decirle a alguien que
puede desvestirse, pero no acercarse al agua, pero así son las cosas.
La estrategia tendrá que ir encontrándola usted solo.
Así como no podía ser más que el Cáncer Stephen Foster
quien compusiera Mi viejo hogar en Kentucky, el símbolo del hogar aparecerá de
una manera u otra en la vida de estos empleados. Es posible que la madre de su
secretaria lunar se presente con frecuencia a buscar a su hija para almorzar con
ella, y también que una madre Cáncer, después de trabajar durante años con toda
responsabilidad en unos grandes almacenes se vaya un día sin más ni más si sabe
que su hijo está enfermo y la necesita. A ese vendedor que nació en julio le
encantará viajar un poco, si es soltero (siempre que alguien llame a su madre
todos los días, mientras él no está, para ver si necesita algo).
Pero si es casado, tal vez no le agrade mucho tener que
salir de la ciudad ni sacrificar un fin de semana en casa por una urgencia
comercial.
Si uno de sus empleados Cáncer está pasando por un trámite
de separación o de divorcio, entonces tiene usted en sus manos un problema que
puede perturbar durante semanas a su personal. El afectado inundará la oficina
con una nube de tristeza.
Si es una mujer, encargue una provisión doble de kleenex
para los aseos de señoras. Habrá periodos de llantos caprichosos, y otros en que
tenga que pasar mucho tiempo en el tribunal. El juez le asignará una sustanciosa
cantidad para la alimentación, que duda cabe. Y si hay que discutir también la
asignación para los niños, la madre necesitará un mes de permiso; que la
abandonen físicamente ya es bastante, pero la amenaza de perder la seguridad
económica movilizará hasta la última gota de su tenacidad... y tiene una gran
dosis. Un hogar destrozado es una cosa muy grave para los Cangrejos de ambos
sexos. Lo mejor que puede hacer un Jefe con esta fijación hogareña de los Cáncer
es colgar un lema en la pared de todos los despachos: <<El hogar está donde está
el corazón>>. Y debajo, uno de esos arreglos de monedas exóticas, con fondo de
terciopelo color lavanda y marco de plata vieja. ¿Que no le ve el sentido?
Ellos, sin duda, lo verán.
Cuando quiera hablar de algo con su empleado Cáncer y le
interese contar con su mentalidad receptiva, invítele a almorzar o a cenar. A
los Cangrejos les encanta la gente que les invita a comer. Y no solo porque
ellos no tendrán que pagar la cuenta; es que para ellos la comida es seguridad,
con mayúscula. Fíjese como se le iluminan los ojos. Tal vez él no sea muy
comilón, pero así y todo se siente mas tranquilo y satisfecho cuando no faltan
las provisiones. Asegúrese de que lo lleva a uno de los mejores restaurantes,
pues cuando no tiene que pagarla, a Cáncer le encanta la suntuosidad.
Los Cáncer son muy trabajadores y se puede confiar en que
sean juiciosos y de fiar en todas las circunstancias, salvo una.
Cáncer es signo de agua, y a la gente que nace bajo los
tres signos de agua le gustan los líquidos, en todas sus formas. Y si los
aspectos entre los planetas estuvieron influidos en el momento del nacimiento,
una de esas formas puede ser la alcohólica. Es raro el nativo de Cáncer en quien
la bebida sea un problema, pero si por casualidad algún empleado nacido en julio
llena con demasiada frecuencia el aire con su excéntrica risa lunar, o si vierte
continuamente lagrimas de melancolía, es posible que cuando baja a la cafetería
pida algo más fuerte que agua tónica. No piense por ello que todos los Piscis,
Escorpio o Cáncer son unos borrachines. Es verdad que la tendencia a ahogar las
penas es mas frecuente en estas personas que en otras, pero la estadística es
algo global, que afecta a millones de seres humanos, y no se puede aplicar para
juzgar individualmente a la gente. La mayoría de los Cáncer que usted pueda
conocer serán gente sobria, hasta el punto de que usted llegue a desear que
ojalá se relajaran un poco bebiéndose un coctel.
Son personas que se toman con seriedad su trabajo, y a sí
mismas con mas seriedad aun. El sentido del humor de la gente lunar es cálido y
maravilloso, pero cuando el ingenio de alguien les toca un punto débil, los
Cangrejos pueden sentirse profundamente heridos. Es mejor dejar que sean ellos
quienes hagan los chistes. Con su corazón bondadoso y la agudeza de su intuición
es improbable que, en su afán de diversión, puedan herir a nadie. El empleado
Cáncer típico no se dedicará a hacer bromas y chistes durante las horas de
trabajo, pero si le lleva usted a cenar, prepárese a no dejar de reírse desde el
zumo de tomate a los fresones con nata. Como conversadores, los Cangrejos pueden
ser absolutamente fascinantes, salvo que estén de ánimo sombrío, y en ese caso
una palabra por hora, breve y cortante, será toda una marca. Para enfurruñarse
son estupendos, pero también pueden ser magnéticos hablando y ganarse fácilmente
las emociones del interlocutor con sus grandes dotes intuitivas.
Cáncer tiene antenas para las cosas. Nadie puede ser más
tierno y compasivo que él cuando uno necesita un amigo, ni más testarudo cuando
sospecha que alguien está tratando de sacarle algo, ya sea emocionalmente o de
manera tangible. Si su saldo no coincide con el del banco, puede sumergirse
durante horas en un silencio hosco, y si un Cangrejo piensa que uno de sus
compañeros anda detrás de su trabajo, puede comportarse en forma bastante
infantil, como preludio a una guerra a muerte por la posesión y la propiedad. Es
posible que la victima no sospeche siquiera que se ha declarado la guerra hasta
que se haya producido la victoria. Cáncer tiene más secretos que el presidente
de Estados Unidos, James Bond y Sherlock Holmes, todos juntos. Es raro que
anuncie por anticipado su jugada, y casi nunca revela sus pensamientos mas
íntimos, a no ser a quienes están tan próximos a él que hay pocas probabilidades
de que la confidencia se vuelva contra ellos como un bumeran.
El Cangrejo se desempeña bien en cualquier cargo que le
permita usar sus habilidades naturales. Es frecuente que obtenga éxito
trabajando como representante de grandes cadenas, en la fabricación y compra de
productos. También la preparación y distribución de alimentos envasados atrae a
más de un Canceriano. Son profesiones típicas de este signo las artísticas
(pintura y escultura), el diseño y decoración de interiores, la música,
conservación de museos, la de escritor, contable, agente inmobiliario, la
fabricación de ropa para niños, la asistencia social, la actuación y dirección
teatrales, la fotografía, jardinería, enseñanza, la banca, el comercio, las
industrias petrolera y naviera y la política. También desempeñarse como gerentes
de hoteles y restaurantes, administrar teatros y gestionar créditos son
ocupaciones naturales para la gente lunar.
Su empleada Cáncer adora a los bebés y a los niños, le
gustan los hombres, las flores, los despachos bien caldeados, la cortesía, el
romance, la cocina, el cine, los libros y el dinero. Es sensible, responsable y
muy capaz. Y también caprichosa.
Su empleado Cáncer adora a los bebés y a los niños, le
gustan las mujeres, el respeto, la admiración, los despachos bien caldeados, la
cortesía, el romance, la cocina, el cine, los libros y el dinero. Es sensible,
responsable y muy capaz. Y también caprichoso.
Bueno, en la playa, ¿acaso puede usted decir en qué se
diferencian los Cangrejitos de las Cangrejitas? Unos y otras son dulces y
sonadores, pero tan sensatos y prácticos como la ropa interior de franela roja.
Ya se alegrará usted de haberlos contratado cuando sus ocupaciones le exijan
salir de la oficina con más frecuencia de la que usted quisiera. A ellos les
encanta vigilar la tienda.